Lecciones de negocios a la hora de buscar un empleo.

 

Cinco ideas extraídas de libros de negocios para mejorar tu búsqueda de empleo.

1) No buscás empleo, vendés competencias en un  mercado. Tus competencias aportan valor a ciertas personas y empresas porque solucionan algunas de sus necesidades, por eso están dispuestos a pagar por ellas.

2) Centrate en las necesidades del cliente. El cliente es la persona o empresa que te va a contratar. El valor del producto que ofrecés depende de sus necesidades. Podés ser el mejor ingeniero del mundo, pero quizá el cliente al que intentás venderle tu producto no necesita al mejor ingeniero del mundo, sino uno con perfil comercial. Nunca intentés vender tu producto como si tuviera calidad en sí mismo, desconectado de las necesidades reales del cliente. Identificá tu target, y céntrate en mostrar con claridad cómo podés contribuir a solucionar las necesidades de tus clientes con tus competencias.

3) Tienes que concocer tu producto para hacer un plan de marketing efectivo. Tu producto no es tu carrera universitaria, ni la motivación que tenés para trabajar en un determinado sector. ¿Te imaginás un comercial que para venderte sus productos usara como argumentos que está muy motivado para vendértelos? Tu motivación no aporta valor en sí misma, lo que aporta valor es el modo en que esa motivación se traduce en mejores resultados para tu cliente en la práctica.

4) ¿Por qué canales te comunicás con tus clientes? Hay muchas formas de comunicar tus competencias. Mandar automáticamente el mismo currículum por internet a 20 empresas cada mañana es sólo una de ellas; sería el equivalente a intentar vender un producto inundando de spam los correros de potenciales clientes. Es una estrategia fácil y rápida, pero poco efectiva. Cuanto más individualizada y personalizada sea la comunicación, más efectiva. Investigá en qué ámbito se mueven tus clientes, salí a buscarlos en los canales donde se mueven habitualmente y utilizá su mismo idioma, para tener una comunicación efectiva.

5) Tienés que conocer cómo es la experiencia de compra de tu cliente, es decir, cómo funciona el proceso de selección de personal por dentro. Por ejemplo, ¿sabés en qué contexto va a ser leído tu CV? Pobablemente alguien de personal tenga que leer una cantidad enorme de currículums, y por cuestiones meramente prácticas no usará más de 20 segundos con cada uno. Hará un barrido visual para detectar ciertas palabras clave, para descartar rápidamente los currículums que no se adaptan al perfil que buscan, y pueda dedicar más tiempo a los que sí se adaptan a primera vista. Tenés 20 segundos para convencer visualmente a alguien de que merecés seguir en el proceso de selección. Tenés que diseñar tu CV para que sea visualmente atractivo y fácil de usar, el que lo lea tiene que poder encontrar lo que busca rápidamente. Destacá aquellas competencias que sean relevantes para satisfacer sus necesidades.